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 Karina Milei busca retener el control mediático: el golpe a la comunicación oficial

Con la salida programada de Adorni en diciembre, la secretaria general presiona para no perder influencia en el relato oficial, entre tensiones con Caputo y planes alternativos.

  • 28/06/2025 • 17:30

La renuncia de *Manuel Adorni* como vocero presidencial —para asumir una banca en la Legislatura porteña— encendió alarmas en la *Secretaría General de la Presidencia. Adorni, considerado mano ejecutiva de *Karina Milei*, deja un vacío en un área que maneja “buena parte de la comunicación oficial”.

 

                          Adorni junto a Lanari

En una reunión de más de tres horas, la hermana del presidente le explicó que “es Karina pura” y que su espacio no puede permitir perder ese dominio. Los puestos clave del área de prensa —a cargo de *Javier Lanari*— y la vocería están en discusión: la incógnita es si Adorni será reemplazado por alguien de su entorno.

Dos nombres comenzaron a circular: el abogado *Francisco Oneto, alineado con el oficialismo, y el periodista **Roberto Funes*, vinculado a un reciente encuentro con el presidente. La movida muestra que Milei busca asegurar el control personal del discurso, sin depender de operadores externos .

Pero su decisión enfrenta otro tablero: el mismísimo *Santiago Caputo*, artífice de la comunicación digital, controla buena parte de las redes y canales de militancia institucional. La tensión interna entre la comunicación tradicional–vocería institucional y la presión hyper-digital comienza a asomar fuertes líneas de conflicto .

Una tercera opción, según fuentes, es mantener a Adorni en el entorno presidencial: que ejerza la banca porteña, pero “a dos pasos de Balcarce 50”. A priori, una señal clara de que *Karina no quiere sacrificar al operador más cercano y confiable para su estrategia comunicacional* .

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Claves para entender el armado

* Control clave*: Mantener la vocería garantiza el relato presidencial intacto frente a adjudicaciones, críticas y temas sensibles.

* Dos equipos en pugna*: el esquema clásico de prensa vs. la comunicación digital estructurada por Caputo.

* Un plan B personal*: la posibilidad de retener a Adorni en la escena, aunque cambie de rol.

 

Karina Milei y su círculo entienden que, sin control del discurso, su poder oficial se diluye. La salida de Adorni abre una nueva pelea política: quién maneja la narrativa del presidente cuando el foco se traslade del poder al legislativo. Y la respuesta podría definir no solo un cargo, sino qué voz marca la agenda del mileísmo en su primera crisis transmitida en directo.